El grupo participó de un nuevo Encuentro de El Séptimo



Electrocardiograma


Entre el 7 y el 14 de enero se realizó en la ciudad de Humahuaca ECG Entrenamiento, Creación y Gestión. Encuentro de El Séptimo
La rueda de los deseos estuvo presente con Gabriela Psenda, Guillermo Bragoni, Valeria Rivas, Daniela Moreno, Nadia Cáceres y Fabián Castellani.

Se dictaron actividades de entrenamiento, creación de materiales escénicos, representaciones, espectáculos y se trabajó sobre el texto Peer Gynt de Ibsen. El equipo docente estuvo coordinado por Antonio Célico, Armando Madero, Javier Lema y Fabián Castellani
Las actividades con la comunidad fueron coordinadas por Valeria Rivas Patricia y Verónica Pesce.
El entrenamiento fue coordinado por Pablo Urruty, Gabriela Psenda, Guillermo Bragoni, Armando Madero y Javier Lema.
También estuvo presenteLa Compañía Nacional de Fósforos.
La rueda estuvo encargada además de algunas pequeñas sorpresitas que acompañaron el recorrido.

Necesidad de defender la leyenda o de esbozar la mentira
El corazón, si pudiese pensar, se detendría. Libro del Desasosiego. Fernando Pessoa.


Sin duda este Séptimo, entre ríos y cerros, entre lágrimas y mentiras nos obligó una vez más a poner a prueba el sentido. Los momentos creados y vividos fueron de desasosiego. La carga de actividades en una ciudad que por suerte todavía se toma su tiempo, los encuentros con el río, con su luna, con el sol de la siesta a las espaldas, las lágrimas que brotaban al contacto del abrazo, o de una canción. Y las piedras y los cardones, testigos fieles y callados del caminar de casi cincuenta personas que viajan kilómetros y kilómetros para desafiar una verdad: la elección pasional por algo que parece ser inútil a los ojos de nuestra sociedad, la sociedad en la que vivimos.
¿Cómo defender un espacio bastardeado, incluso a veces, por propios colegas?
¿Cómo mantener las fuerzas? ¿Cómo seguir construyendo el teatro, nuestro teatro, el de cada grupo o persona que se acercó a Humahuaca?
Sin dudas, la prepotencia del trabajo arltiana nos confronta y nos abraza. La necesidad satisfecha de encontrarnos con pares, con dobles, con espejos de mar, de montaña, de desierto, de grandes urbes nos reconforta. Nos llena de alegría. Al menos en el momento de la euforía, del sinsentido del viaje, encuentro, trabajo, cansancio, hastío, diversión, miedo, asfixia, dolor, del físico y del otro, juego, ausencia, deseo, del físico y del otro, calor, frío, amor, rechazo, juego, presencia, mirada, comunión y partida.

1 comentario:

Anónimo dijo...

cuanto màs me enamoro,màs turbulencias hay en mi alma y màs busco la paz, en tus ojos y tu belleza Vincent. no me sueltes la mano, que se me cae el corazòn